Cruce de caminos...

Este fin de semana me lo he pasado hablando...hablando y hablando..., me he encontrado con una persona, por segunda vez en mi vida con la que me ha vuelto a pasar lo mismo que la primera vez que lo conocí...nos hemos dedicado a hablar y hablar tooooooda la noche..., hablamos de lo humano y lo divino, del amor en todas sus variantes, de la diferente manera  que tenemos de ver el mundo y las relaciones  los hombres y las mujeres..., pero más que centrarme en el contenido de la conversación (que para ser justos, y dado el grado de intoxicación alcohólica que , al menos yo presentaba, no recuerdo en su totalidad), me gustaría hablaros de la naturalidad con la que nos desvelamos nuestros más íntimos secretos (supongo que en esto también influiría el alcohol, claro ..), me gustaría que os imaginaseis como vimos amanecer hablando de nuestros respectivos amores y desamores, de como me sinceré y le conté a un perfecto desconocido como me siento en esta nueva etapa de mi vida,  de como me sorprendí a mi misma a las 7 de la mañana, despidiéndome de él, como si nos conociésemos de toda la vida....
Los caminos del señor son inexcrutables...o eso dicen no?