"Si me engañas una vez, la culpa será tuya.., pero si me engañas dos veces, entonces la culpa será sólo mía.."
Esta frase resume en pocas palabras lo que pienso sobre las mentiras.. , el problema viene cuando quien te engaña no es sino tu propio corazón.., y os puedo asegurar que el mío me engaña no una, ni dos, ni tres.., yo creo que ya va para la decena las veces que me ha engañado..
Es lo que tiene enamorarse...que sólo ves lo que quieres ver, sólo oyes lo que quieres oír..y justo lo que no ves y lo que no oyes, es en lo que el corazón debería insistir, pero no...este músculo solitario y arrogante, siempre cree que tiene razón...y no admite consejos de nadie.
Pero yo se la verdad, se que mi corazón, detrás de esa fachada de seguridad y autosuficiencia , en el fondo se siente pequeñito y, algunas veces miserable.., cree que no se merece que lo quieran, y ya no digamos que lo amen.., se escuda en mil excusas baratas, para tratar de engañarme..., me da mal las indicaciones tratando de confundirme y, en el aturdimiento del instante, hacer que baje la guardia , hacer que me relaje...
Muy bien corazón, una vez más tu ganas..., he vuelto a equivocarme.. tenía las expectativas tan altas..., que por mirar hacía arriba, no he visto el agujero al que me enviabas... ya saldaremos cuentas tú y yo, que me debes unas cuantas..., pero eso será otro día, para cuando se me cure, una vez más y ya van muchas, el alma..
No hay agujero tan profundo del que no puedas salir. Si no puedes sola, sobrarán brazos y manos que te presten su ayuda. Y si tu corazón se siente pequeñito y miserable ya sabes que basta que hable con el mio para que se de cuenta de lo que vale. Sir Percy Blakeney.
ResponderEliminardejalo que ejerza su función a su aire.dejale libre
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